Turismo 18 agosto, 2020
El cuidado de los excursionistas y campamentistas serán la premisa de funcionamiento de este atractivo en la próxima temporada.
Seguridad al visitante, distanciamiento social mediante divisiones y parcelas, ahorro de recursos mediante proyectos de energía solar y sustentabilidad ambiental mediante la incursión de especies autóctonas son los principales ejes de trabajo.
En materia de seguridad, trabajo pendiente de los últimos años, se está reorganizando y reemplazando el tendido eléctrico, principalmente en la zona de camping. Dentro de esta área también se tomó intervención en el cuidado y poda de los árboles deteriorados, ya que para la temporada 2019-2020 no se habían realizado las tareas de acondicionamiento necesarias.
Dentro del sector camping, además, se plantaron estratégicamente 15 ejemplares de Ingá que permitirán, en un futuro, erradicar selectivamente las especies exóticas.
El distanciamiento social de los campamentistas se garantizará mediante parcelas de entre 80 y 30 mt2, cada una de ellas equipadas con: toma corriente, mesa, bancos y parrilla. Además, se está mejorando el relieve para un correcto drenaje en los días de lluvia.
En consonancia con los trabajos de mejoras, se proyectan luces led para la playa, la incorporación de senderos accesibles en la reserva natural y un invernadero para el cultivo de flora autóctona.